Luego de que Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud, calificará como “golpe de estado” las denuncias de desabasto de medicamento para niños con cáncer, políticos de oposición exigieron su renuncia.
Alejandro Moreno, presidente del PRI, consideró que acusar a las familias de niños con cáncer de ser parte de un complot es algo inhumano, indignante y representa un insulto para la tragedia que están viviendo.
Moreno demandó que el Gobierno Federal asuma inmediatamente su papel y dé solución, “en vez de intentar ocultar su ineptitud”.
Fue a través de su cuenta oficial de Twitter, que el partido calificó los señalamientos del subsecretario de Salud como “miserables” y pidió separarlo de su cargo, de manera inmediata, “por la salud de los mexicanos”.
Por su parte, Carolina Viggiano, secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, aseveró que a diario mueren seis niños con cáncer en México y para nuestro gobierno esto significa “ser golpista”, al tiempo que cuestionó cuántos tratamientos se comprarían con los más de 500 millones de pesos que se usarán en la consulta popular.
Mientras tanto, el dirigente del PAN, Marko Cortés, acusó al gobierno de la Cuarta Transformación de incumplir su promesa y dejar a “miles de niños con cáncer sin medicinas ni tratamiento”.
“Es increíble tanta insensibilidad, pero para sus caprichos sí hay dinero y ni una sola obstrucción”, dijo Cortés.
Por su parte, el dirigente nacional del PAN, Jesús Zambrano, llamó “miserable” a Hugo López-Gatell, y aseguró que se encontraba “cobijado por el manto protector de López Obrador”.
En sus declaraciones, López-Gatell afirmó que las manifestaciones forman parte de campañas orquestadas por “grupos de derecha internacionales”, e, incluso, dijo que tienen identificados a ex-funcionarios, funcionarios y legisladores del PAN y PRI que “participaron en el jugoso negocio de la corrupción del abasto de medicamentos en administraciones pasadas”.
Con información de Aristegui Noticias