Lola es una perrita que se convirtió en la primera clienta de una taquería en Ciudad Victoria, Tamaulipas, pero con el tiempo se hizo empleada del lugar, ahora es la que llega más temprano y la última que se va, y siempre se lleva su recompensa.
Ante la queja de varios comensales, la taquería publicó una foto de Lola en su página de Facebook, aclarando que no es un perro callejero, sino una colaboradora y amiga del local de comida. La imagen se ha compartido más de 100 mil veces.
“Amigos ella es LOLA y es parte de la familia de Taquerías Torres, ya que fue nuestra primera clienta, de antemano si alguna vez les ha incomodado les ofrecemos una disculpa, pero queremos decirles que ella está comprometida con el equipo, ya que es la que llega más temprano y es la última que se va, claro que siempre se lleva su recompensa”.
La publicación también dice que Lola sí tiene hogar, pero que a ella le gusta trabajar, es muy entendida, y les piden a sus clientes que no la maltratan, pues Lola está ahí para ayudar, no para molestar.
“No la regañen compréndanla tiene muy buen gusto por los tacos. Nosotros la queremos mucho y formará parte del equipo hasta que ella quiera”.
¿Quién es Lola?
Es una perra mestiza que vive en Ciudad Victoria, Tamaulipas, de unos seis o siete años de edad, que está desde la tarde hasta la noche en la taquería, acompañando a los comensales, aunque no a todos les ha caído bien su compañía, pues creen que es un perro callejero en busca de comida.
Lola tiene muchos años viviendo en ese sector sobre el 16, pasando arcos de Villarreal. Es muy noble y entendida, mucha gente le ayuda y le da de comer. Tiene un lugar donde se resguarda ahí cerquita, pero a ella le gusta recorrer la cuadra y acompañar a los vendedores, con eso se gana su comida.
Colaboradores perrunos
Melisa Pineda, encargada de la taquería, contó a Verne que Lola y variosperros de la calle donde se ubican, son bienvenidos como colaboradores.
“Recibimos comentarios de por qué teníamos perros que a veces dan mal aspecto. Ellos siempre han estado aquí y tienen sus propietarios, su casa y alimentos, pero en la taquería nos han caído muy bien y los adoptamos como colaboradores“.
En este negocio buscan dar un buen servicio a sus clientes sin dejar de lado las necesidades de sus amigos perrunos: Lola, Peluche y Archi. Al respecto dijo Melisa.
“Esperamos a todos los clientes y queremos que tengan comprensión con los perros, porque son seres vivos que también merecen respeto, aunque no tengan hogar. Algunos los ven con malos ojos, pero otros hasta les ofrecen un taco“.
Con información de El País
