La vida del actor quedó marcada por el terrible accidente que sufrió el 27 de mayo de 1995, durante un concurso de equitación con salto de obstáculos en Culpeper (Virginia).
El doodle de Google es dedicado al actor, director de cine y activista neoyorkino Christopher Reeve, mundialmente famoso por su papel de Superman en las películas de 1978, 1980, 1983 y 1987.
La vida del actor quedó marcada por el terrible accidente que sufrió el 27 de mayo de 1995, durante un concurso de equitación con salto de obstáculos en Culpeper (Virginia).
Reeve intentó superar un obstáculo, pero cayó de cabeza de su caballo, lo que le provocó la fractura de dos vértebras cervicales y le seccionó la médula espinal. Su respiración fue bloqueada y al mismo tiempo perdió la movilidad total de su cuerpo, desde entonces permaneció en una silla de ruedas, con respiración asistida. Fue sometido a una peligrosa operación, pero sólo pudo recuperar la movilidad de los dedos de su mano izquierda, lo que le costó mucho esfuerzo. Sus doctores hicieron el anuncio fatal: la lesión era de carácter irreversible.
Cuando joven, Christopher Reeve estudió en la Princeton Day School, donde trabajaba de ayudante del director de la orquesta del instituto. Cantaba en un coro local como barítono y tras trabajar desde la adolescencia, debutó como actor a los 15 años en el Williamstown Theatre Festival.
Más tarde se dedicó a trabajar en obras de Broadway que lo satisfacían como actor, pero no le dejaban mucho dinero, por lo que pensó en dejar la actuación y trabajar junto a su padre. Pero en ese momento se enteró que buscaban un actor para interpretar a Superman y acudió al casting.
Fue elegido sin dudarlo ya que era deportista, excelente nadador, aficionado al hockey sobre hielo y la equitación, piloto licenciado, contaba con un físico de 1.93 metros de estatura y una apariencia de joven bonachón, además, sus rasgos se parecían asombrosamente al héroe del cómic.
