El Estado de México se ha posicionado como el principal productor de flores de ornato del país, especialmente en la celebración del Día de las Madres, donde sus rosas cubren el 77.6% de la demanda nacional.
Con más de 12 mil hectáreas dedicadas al cultivo anual, el Estado de México no solo lidera en cantidad sino también en diversidad. La Secretaría del Campo destaca seis especies principales que se comercializan intensamente durante esta temporada: rosas, claveles, crisantemos, gerberas, gladiolas y lilis.
Los consumidores pueden adquirir flores mexiquenses directamente de los productores en varios puntos clave como el mercado de Villa Guerrero, Floracopio en San Antonio la Isla, y el Mercado de Flores en Tenancingo, además de los tradicionales puntos de venta en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México como el Mercado de Jamaica y la Central de Abasto.
Esta industria no solo embellece festividades sino que también es una fuente vital de empleo. Más de 60 mil empleos permanentes y eventuales se generan gracias al sector florícola, especialmente en el Corredor Florícola de Villa Guerrero. Esta región beneficia a trabajadores de municipios vecinos y de estados como Guerrero, Morelos, Michoacán y Chiapas.
El Estado de México se consolida como un gigante en la producción florícola, liderando con su diversidad y volumen durante el Día de las Madres. La industria no solo celebra con belleza, sino que impulsa la economía local y sostiene decenas de miles de empleos, demostrando el poder de la floricultura en el desarrollo regional y la importancia de mantener y apoyar esta vital industria.
