El volcán Popocatépetl, ubicado en el centro de México, es uno de los volcanes más activos y emblemáticos del país. Su actividad volcánica puede tener repercusiones en los municipios cercanos, generando preocupación y medidas de prevención. En este artículo, exploraremos los municipios del Estado de México que se ven afectados por la actividad del volcán Popocatépetl.
Municipios en zona de influencia directa del Popocatépetl:
Los municipios que se encuentran en la zona de influencia directa del volcán Popocatépetl son los más propensos a sufrir los efectos de una erupción. Algunos de estos municipios incluyen:
- Amecameca: Ubicado al sureste del volcán, Amecameca es uno de los municipios más cercanos a la zona de peligro. En caso de una erupción importante, podría experimentar caída de cenizas y emisiones de gases volcánicos.
- Ozumba: Situado al este del volcán, Ozumba también se encuentra en una posición vulnerable. Las emisiones volcánicas y la caída de cenizas son posibles consecuencias en caso de actividad eruptiva.
- Tlalmanalco: Este municipio se encuentra al sureste del Popocatépetl y puede verse afectado por los fenómenos volcánicos, especialmente la caída de cenizas.
Municipios en zona de influencia indirecta:
Además de los municipios directamente expuestos a la actividad volcánica, existen otros que se encuentran en la zona de influencia indirecta del Popocatépetl. Estos municipios pueden experimentar efectos secundarios como:
- Chalco: Aunque no se encuentra tan cercano al volcán, Chalco puede experimentar caída de cenizas y afectaciones en la calidad del aire durante episodios eruptivos.
- Ixtapaluca: Ubicado al este del Popocatépetl, Ixtapaluca puede recibir la caída de cenizas y enfrentar problemas de salud y limpieza durante una erupción.
- Valle de Chalco Solidaridad: Este municipio también se encuentra en la zona de influencia indirecta del volcán, por lo que puede verse afectado por la caída de cenizas y la emisión de gases.
El volcán Popocatépetl tiene un impacto significativo en los municipios del Estado de México que se encuentran cerca de su actividad volcánica. Tanto los municipios en la zona de influencia directa como aquellos en la zona de influencia indirecta deben estar preparados para afrontar los posibles efectos de una erupción, como la caída de cenizas y emisiones de gases. Es fundamental contar con planes de contingencia y estar alerta a las indicaciones de las autoridades para garantizar la seguridad de la población.
