Capulhuac, Edomex.- El 26 de febrero Raúl salió de su departamento ubicado en Toluca, con dirección a San Pedro Tlaltizapán para reunirse con unos familiares; sin embargo, al finalizar la reunión, salió y se dirigió a la capital mexiquense nuevamente, pero nunca llegó a casa.
Desafortunadamente, a pesar de los esfuerzos de las autoridades estatales y federales por hallarlo sano y salvo, el 1 de abril fue localizado sin vida en las ciénegas que conectan en el municipio de Capulhuac.
Pero fue hasta este 15 de mayo que tras ser velado en la casa de su familia en Santa Cruz Atizapán, el féretro fue trasladado hasta la zona norte de la entidad mexiquense, ya que nació en dicha región hace 21 años.
Por su parte, familiares y amigos lo esperaron e hicieron un camino de pinos, pues en vida le gustaba plantar árboles; además, sus compañeros cargaron fotografías y entonaron alabanzas religiosas.
“La noticia nos partió el alma y deja una gran herida en cada corazón de quienes le amamos. Aún con toda la situación adversa que hemos vivido a lo largo de estos casi tres meses y sin perder de vista que seguiremos exigiendo justicia para Raúl, hoy estamos aquí para celebrar su vida y despedirlo con todo el amor que siempre nos inspiró”, dijo Araceli, su madre.
Con información de Milenio y El Universal
