Una momia egipcia que antes se creía que era un sacerdote resultó ser una mujer embarazada.
Científicos polacos que desde 2015 han venido trabajando en el Proyecto de las Momias de Varsovia, se llevaron una sorpresa, pues luego de analizar momias de animales y personas del Antiguo Egipto, descubrieron que la momia que ellos habían identificado como un sacerdote realmente era una mujer embarazada.
Siendo la primera en toda la historia, los científicos pudieron constatarlo luego de detectar un pequeño pie en el vientre durante la exploración. Al inicio se creía que era una mujer, pero la visión cambió luego durante la década de 1920 cuando se tradujo una inscripción en el sarcófago para revelar el nombre de un sacerdote egipcio, Hor-Djehuty.
Durante el curso de su investigación, el equipo reveló algunas pistas interesantes. Usando tomografía computarizada, los vendajes de la momia no tenían que ser removidos, encontraron que el cuerpo tenía una estructura esquelética delicada.
Un análisis más detallado convenció a los investigadores de que el cuerpo era femenino ya que no había señales de pene y se cree que la mujer murió entre sus 20 y 30 años y que el feto habría tenido entre 26 y 30 semanas de gestación.
Aunque pertenece a la Universidad de Varsovia, la momia ha estado en préstamo en el museo desde 1917, donde ha estado en exhibición. Respecto a los antecedentes de la momia, Ejsmond destacó que es difícil saberlo pues en el Antiguo Egipto en algunas ocasiones los sarcófagos eran reutilizados luego de que las tumbas eran robadas.
Sus hallazgos han sido publicados en el Journal of Archaeological Science.
Con información de CNN
